La Humedad

Así...Así mi Señor... enseñeme nuevamente su dulce respiración, deleitese con mis gemidos

de sumisa, sienta mi piel estremecerse con su mirada, pervierta mis sentidos,

tome lo que le pertenece, eso es lo que mi mente pedía a gritos...

Mirando el suelo con vergüenza por mi desnudes, por ser tan pequeña

junto a su potente imagen , mi Amo me ordena que me ponga en mi lugar,

y en un segundo tomo mi puesto que es en el suelo, junto a sus pies,

mis manos extendidas, cola parada, frente en el suelo, siento el calor de sus manos,

acercándose a mi espalda, cariñando mi cabello, suave, delicado,

ordenado como a usted le gusta, me toma los cabellos, los huele,

y pasa su mano por mi espalda, y me dice ,

muy bien perra, así me gustas...

Siento, como su mano sigue examinando, tocando cada milímetro de mi suave piel,

el calor de su mano es maravilloso, no deja que ningún centímetro, de mi cuerpo

quede sin calor, sin su calor, me dice : separa las piernas perrita, deja ver

que me tienes de sorpresa, tan solo con oír esas palabras mi sexo y mi respiracion

se pusieron a full...umm que delicia, ya disfrutaba sin que Usted me tocara mi Señor,

separe las piernas, levante mas y mas mi cola... senti su manos dentro de mi

y con una risa burlona, me dice... putita mi puta, que sucede tanto extrañaba

la manos de su Amo, mis respiros se intensificaron, seguia respirando

mas y mas agitado , mientras dentro de mi, sentía las caricias de sus dedos,

entrando y saliendo de mi cuerpo, que digo mi cuerpo, perdón mi Amo ,

este cuerpo le pertenece al igual que mis pensamientos, sentí y disfrute

de como sus dedos aprietan mi clítoris, siento la humedad en mi....

Saca su mano y la pasa por mi espalda, el solo oír la vos de mi Señor, comenzaba la entrega, mi entrega, nuestra entrega al juego de su poder...Me humillo ante su mirada,

paso sus dedos húmedos por mis jugos y me los dio a lamer, me dijo limpialos uno a uno,

y disfruta de tu sabor...

Tomo mis cabellos, y jalo mi cuello hacia atrás, y me regreso a mi lugar,

puso mi cabeza entre sus piernas, y comenzo a azotar mi trasero,

una y otra vez hasta que mis chillidos no fueron mas que gemidos,

metió su mano con rapidez a mi vagina, y la sintió mas húmeda, que en el comienzo,

y me dice...

asi...asi puta debes estar de solo pensar en mi.

Atte.dulce_perversion